La hora del café

Pedir un café en Italia

El café en Italia, por lo general se pide en la barra del bar o de la cafetería. La mayoría lo paga antes de que se lo preparen y siempre se sirve con un vaso de agua, para limpiar la boca antes y después del ritual. Es una costumbre rápida, que no lleva más de unos minutos y que, eso sí, se repite varias veces el día.

Hay un café italiano para cada momento. Y, además, cada uno de ellos puede ser muy diferente del anterior. Así, nada tiene que ver el capuccino o el macchiato del desayuno con el ristretto de media mañana o el corretto post-comida.

Eso no quiere decir que no se pueda pedir en las cafeterías de la forma en que más le guste a cada uno y en el momento que considere conveniente. Pero, digamos, que no estará muy bien visto por los puristas de esta bebida, que en el caso de Italia son, prácticamente, todos los italianos.

Un dato a tener muy en cuenta: los cafés que se sirven con leche solo se deben tomar en el desayuno. Y, por supuesto, nunca para acompañar al postre de la comida o de la cena.

Estas son las formas principales de preparar un café en Italia:

  • Espresso: intenso, corto y absolutamente aromático. Es, sin duda, la mejor forma de extraer todos los aromas, el sabor y la intensidad de un buen café.
  • Ristretto: aún más concentrado que el espresso. De hecho, en la cafetera italiana se pone la misma cantidad de café que el anterior pero con la mitad de agua.
  • Cappuccino: es el café italiano con leche por definición. Aunque, más bien, se trata de un café (espresso) con espuma de leche. En algunas cafeterías se decora con cacao en polvo, aunque no es la norma en ese país.
  • Americano: es el menos intenso de los cafés en Italia. Con más proporción de agua que ninguna otra variedad.
  • Corretto: es lo más parecido al carajillo que se toma en España. Es decir, café con un chorrito de licor, por lo general grappa.
  • Latte macchiatto: o lo que es lo mismo, un café con leche grande. En las cafeterías de Milán suele servirse, sobre todo, a los no italianos.
  • Maroccino: es una exquisitez muy dulce y rara de encontrar en otros lugares del mundo. Se prepara con café, leche, nata y cacao.